viernes, marzo 13, 2020

Estado de Alarma #Coronavirus #YoMeQuedoEnCasa

Desde ayer hemos vivido unos momentos bastantes intensos, pegados al WhatsApp desde que me quedé en casa.



El ambiente cambiaba repentinamente, como si de un interruptor se tratara, o la luz del sol desapareciera bajo un eclipse lunar o lo virtual de pronto se hiciera real.

He pasado más de un mes bastante preocupado por mi hijo en cuarentena en China, con lo que me informaba por WeChat, allí no funciona el WhatsApp. La Empresa donde trabaja le dio dos días antes de vacaciones del año nuevo chino para que no coincidieran con el movimiento más masivo a nivel mundial de 3000 millones de desplazamientos. Pasó unos días en Seúl, pero al regresar a Shanghái en la empresa le dijeron que se retrasaba la vuelta de vacaciones y que no volviera de momento, viajando a Bangkok donde estuvo hablando incluso con el Embajador Español para conocer la situación y le informó que como estaba trabajando en China debía volver para controlar su situación desde allí. Este fue su momento más crítico, donde dudaba de volver a España después de estar trabajando 5 años en China o regresar a Shanghái en uno de los momentos más críticos de la famosa curva del coronavirus.

Decidió regresar Shanghái unos días más tarde del fin de las vacaciones del año nuevo chino para no coincidir tampoco en el desplazamiento masivo, tal y como le recomendó la empresa y a la vuelta se encontró con su casera y comisaria política de la urbanización que le dio una tarjeta identificativa, con las instrucciones siguientes: "Pasar a estado de cuarentena en su casa sin poder salir, tomarse la temperatura todas las mañanas, enviar una foto del termómetro eléctrico y digital con la temperatura, si un día no enviaba la foto con la temperatura recibiría a la policía para pedirle explicaciones, si un día subía la temperatura recibiría a un equipo médico en su casa", "con uniforme de astronauta".

Ya pasó la cuarentena, le han dado otra tarjeta que le identifica como "libre de coronavirus", puede salir un momento a comprar y está a la espera que por fin terminen las medidas de contención y pueda regresar al trabajo, algo que ya no parece muy lejano, dado que China ya ha superado el pico de transmisiones del coronavirus.

Ahora se han cambiado las tornas, es mi hijo desde China el que está preocupado por su familia en España, Europa ya es el epicentro de la pandemia del coronavirus.  El domingo pasado, en el día Internacional de la mujer 8M, mi otro hijo me enseñaba unos gráficos que estaba desarrollando, del estudio comparativo de la evolución del coronavirus de España comparado con Italia donde claramente se veía que, con un desfase de días, estábamos siguiendo el mismo camino. Pero es en esta semana cuando se han precipitado las cosas hasta el día de hoy que se ha declarado el Estado de Alerta durante 15 días. 

De repente el lunes se empieza a agravar la situación sobre todo en Madrid,  el martes se anuncia el aplazamiento de las fallas. El miércoles, en el Consejo de Participación Ciudadana se nos informa entre otras cosas del Transporte a Demanda para las personas con Movilidad reducida que va a poner en pruebas el Ayuntamiento, mientras pensaba en la posibilidad de una pareja de ancianos en cuarentena en su chalet y como iban a poder satisfacer sus necesidades alimenticias y farmacéuticas en enfermedades crónicas, y por mi parte preguntaba si el Ayuntamiento tenía previsto algún Plan de Acción contra el Coronavirus. Ayer mismo el Presidente del Gobierno presentaba un Plan de choque contra el Coronavirus, Educación anunciaba la suspensión de la actividad docente en todos los niveles educativos y el Ayuntamiento lanzaba un Bando Municipal sobre las medidas extraordinarias que se adoptan en l'Eliana con respecto a la pandemia de coronavirus Covid-19, que los servicios esenciales están garantizados y que existe un Plan de Contingencia Municipal al respecto. Hoy la Generalitat decreta el cierre de bares, restaurantes y todo el sector de la hostelería y el Gobierno el Estado de Alarma.

Solo queda decir ante esta situación que atendamos a las recomendaciones recibidas por las autoridades para aplanar la curva del coronavirus, salir de esta situación es responsabilidad de todos:
  • No viajar si no es necesario.
  • Reducir el contacto. 
  • Lavarse las manos, limpiar el móvil y evitar tocarse la cara.
  • A los jóvenes, aunque no sean de riesgo, que tengan en cuenta que la suspensiones de las clases, no es para irse de fiesta.
  • A las personas mayores y de riesgo que limiten las salidas de su hogar o residencia. #YoMeQuedoEnCasa.
  • En caso de síntomas de fiebre, tos seca, dolor de garganta, dificultad respiratoria llamar al 900 300 555.

Javier Belmonte

Miembro del Foro de la Agenda 21 y del Consejo de Participación Ciudadana, representando a la Coordinadora en Defensa de los Bosques del Turia en l'Eliana y del Centro de Estudios Locales (CEL)

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