En esta Nueva Normalidad al pasar de la Cuarentena confinada a la Cuarentena social, mientras virus congelados bajo el Permafrost Siberiano durante milenios están preparados para contagiar debido al Calentamiento Global, de la Responsabilidad Individual depende nuestro Equilibrio Sanitario, Económico, Político, Social y el de nuestro propio Entorno Natural.
Playas de Valencia el día de San Juan, manteniendo la Distancia Social de la Nueva Normalidad tras tres meses de Alarma Sanitaria por el Coronavirus
El Universo es un gran Sistema con subsistemas isomorfos con aspecto polimórfico que se retroalimentan. El Hombre como ser vivo surge y se difumina en el Universo material, pero durante su existencia interactúa con el Sistema alterándolo y produciendo desequilibrios en su propio Entorno.
Arrancando la Nueva Normalidad saltaba la noticia: “Se ha registrado en la ciudad más fría del mundo la temperatura de 38º, la más alta jamás observada en la historia al norte del círculo polar ártico desde que hay registros, que se remontan al año 1885”.
El Ártico se calienta al doble del ritmo que el resto del planeta
Si hay algo que no cambia en la vuelta a la Nueva Normalidad, tras el confinamiento de tres meses por el Estado de Alarma ante la Emergencia Sanitaria debido al Coronavirus, es la Emergencia Climática en la que nos seguimos encontrando por el Cambio Climático que sigue ahí y va a más.
Todo está relacionado. Según un informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), una gran parte del permafrost podría derretirse hasta el 2100, liberando una gran cantidad de carbono de gases de efecto invernadero, retroalimentando el proceso. Y eso no es todo. Ahora que una pandemia ha golpeado al mundo y nos ha pillado desprevenidos, ahora que el miedo se ha instalado entre nosotros y las medidas de precaución nos pueden acompañar años, la descongelación del permafrost también amenaza con desbloquear las bacterias y virus que causan enfermedades atrapados durante mucho tiempo en el hielo. En 2016, un niño murió en el extremo norte de Siberia, en un brote de ántrax que, según los científicos, parecía provenir de los cadáveres de renos infectados enterrados 70 años antes, pero descubiertos por el derretimiento del permafrost. Liberado del hielo, el ántrax parece haberse pasado a los rebaños de pastoreo.
Opinión
Estamos entrando en verano y los medios de información, una vez terminado el Estado de Alarma, se centran en varios temas relacionados entre sí:
- Alerta del Organización Mundial de la Salud ante posibles rebrotes del Coronavirus.
- Falta de unanimidad entre los países a nivel mundial, estados europeo y entre los partidos políticos españoles para afrontar la nueva realidad sanitaria, económica y social en la que nos encontramos en plena pandemia mundial, con la excepción del acuerdo en el Congreso para acometer la nueva realidad.
- La falta de responsabilidad social de parte de la sociedad y en particular en parte de la juventud, que no asume el riesgo de posibles contagios, como si no fuera con ellos.
- Las olas de calor cada vez más intensas al inicio del verano.
La acción individual de cada persona conlleva su propia responsabilidad.
Toda persona con su propia actitud y forma de proceder influye en su propio entorno:
- Al no guardar la distancia social, no usar mascarilla y sin sensación de riesgo, siendo asintomático, con el riesgo de contagiar a compañeros, amigos y familiares, que si se pueden ver afectados en su salud, incluso con la muerte.
- Al ir al campo o a la playa en verano y tirar la mascarilla, botellas o plásticos al suelo o la arena, de tal forma que pudiera ir a parar a los ríos o al mar, con el riesgo de encontrarnos más mascarillas que medusas en el próximo baño.
- Al ser egocéntrico e insolidario con el riesgo de que nos paguen con la misma moneda en caso de que cambiemos a estado de necesidad.
Seamos responsables de nuestros actos, todo está relacionado, nos queda un año hasta que sea oficial la vacuna para el coronavirus según la OMS, la Emergencia Sanitaria no ha acabado y seguimos en plena Emergencia Climática que durará bastante más. La acción conjunta de la sociedad ante estos retos es la suma de la acción individual de cada uno, teniendo en cuenta que toda acción de desequilibrio tiene su reacción de búsqueda del mismo.
Javier Belmonte 26/06/20 Representante de la Coordinadora en Defensa de los Bosques del Turia en el Consejo de Participación Ciudadana de l’Eliana.
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