"La gente está orgullosa de ser de l’Eliana, aquí no hubo pelotazos urbanísticos".
Asegura que la tesorería está en plena forma y les ha permitido repartir ayudas propias a comercios, hostelería y autónomos por 1,2 millones.
El alcalde de l’Eliana, Salva Torrent, ayer en el ayuntamiento. Foto: PACO CALABUIG
¿ En qué situación se encuentra l’Eliana por la covid-19?
Estamos muy bien, con 11 positivos y una incidencia de 60 por casos, pero el 29 de enero estábamos en 1.250. No sabíamos qué hacer. Las restricciones nos han ayudado. En total han fallecido 25 personas, el 95 % de ellas en residencias.
¿Cuál ha sido el momento más duro como alcalde?
Con el brote en una residencia en abril. Nos llamaban a nosotros e intentábamos desinfectar, cambiar los contenedores… allí donde nuestras competencias llegaban. Ahora, en enero, también fue horrible. En nuestro centro de salud se hacían 120 pruebas al día, ahora estamos en 16 diarias.
¿Qué falló en la gestión?
No se atendió a las residencias. Me pongo en el papel de quien toma las decisiones y no es fácil. Sanidad pidió enfermeros y salieron de estos centros, los dejó desvalidos. No se hizo bien. En una encuesta, la ciudadanía le daba la mejor puntuación a los ayuntamientos, luego autonomías y por último al gobierno. Estamos en primera línea pero no tomamos decisiones.
¿Cómo se plantea el futuro?
Con cautela. Cada vez que aceleramos, el virus golpea más fuerte. La cuarta ola depende de nosotros.
¿En qué punto se encuentra la vacunación en l’Eliana?
Ahora es el turno de los grandes dependientes, mayores de 87 años y fuerzas de seguridad. En fechas próximas serán los docentes.
¿La relación con Salud Pública ha sido buena?
Al principio no teníamos información, después mejoró mucho. Nos llegaban datos que no se correspondían con lo que contaban los vecinos. Ha habido mucho hermetismo en conselleria, no tanto en la última etapa. Entiendo que es complicado, pero a veces los alcaldes nos hemos encontrado desamparados, no nos ha ayudado nadie.
¿Habrá vacaciones escolares en Fallas?
El Consell Escolar se reunirá el día 10, pero lo vemos complicado. Se podría cambiar y terminar el curso dos días antes. En Fallas tendremos actos simbólicos.
¿Y la Virgen del Carmen?
Ni nos lo hemos planteado. Algo se hará, pero sin aglomeraciones.
¿Ya se han activado los planes de recuperación?
Al principio de la pandemia iniciamos l’Eliana Impulsa. Tenemos buena tesorería, así que movilizamos 1,2 millones de euros para comercios y autónomos. Había 300.000 euros en ayudas directas. Ahora, con el Plan Resistir, somos el municipio de Camp de Túria que más ayudas vamos a recibir: 750.000 euros para los 150 bares y restaurantes que tenemos. Si no es suficiente, no descartamos otras ayudas directas con nuestro remanente.
¿Cómo se gestiona un municipio dividido entre un casco urbano y más de 9.000 chalés?
Nunca lo he diferenciado, es así desde los años 50. Los chalés están integrados y es importante que se sientan parte del pueblo.
¿Cuál es el atractivo para que tantas personas se muden allí?
La calidad de vida es muy elevada, hay zonas verdes y mucha cultura. No hace falta ir a València a ver a José Sacristán, por ejemplo, lo ves aquí. Estamos a 15 kilómetros de la capital, muchos profesionales liberales trabajan allí y viven aquí, y los fines de semana, hacen vida aquí. En el confinamiento también ha venido mucha gente, pero es difícil de medir porque no se empadronan.
¿Qué servicios faltan?
Un transporte público de calidad. Ahora, la conselleria de Política Territorial ha aumentado la frecuencia del metro para que pase cada 10 minutos y no cada 35, como antes, algo se ha mejorado.
La revitalización del barranco de Mandor parece que va a ser una realidad pronto.
Se avanzó bastante en los últimos años. El proyecto quiere conectar el cauce con el Túria. Es un proyecto ambicioso y hemos pedido fondos a la UE.
L’Eliana es de los pocos municipios que jamás ha cambiado de color político.
En los 42 años de gobierno socialista jamás ha habido un escándalo. Es importante estar encima de los vecinos y tenemos un buen equipo técnico. La gente se siente orgullosa de la marca l’Eliana. No ha habido pelotazos urbanísticos ni grandes edificios, prevalece la calidad de vida por encima de intereses económicos.
Esta es su segunda legislatura, ¿habrá una tercera?
Mi intención es que sí, pero no quiero hacerlo mucho más largo. Mi objetivo era mejorar la tarea de mis antecesores, que fueron mis referentes. No tengo el mismo perfil político, soy más tecnócrata. La primera legislatura gobernamos en coalición y en la segunda tuvimos mayoría absoluta. Quiero ver qué valoración hacen de nosotros en unas terceras elecciones.
Amparo Soria https://www.levante-emv.com
