Acuerdo para que L'Eliana pueda ceder agua a la Ciudad Deportiva del Valencia en Porchinos (Ribarroja)

Ribarroja ofrece un pozo de agua más para que el juez autorice la Ciudad del Valencia en Porchinos

El alcalde asegura que el acuífero puede abastecer a más del doble de la nueva población prevista

El alcalde de Ribarroja, Francisco Tarazona, afirma que el Ayuntamiento tiene reservado para Porchinos un pozo del que se puede sacar agua para el doble de la población que vivirá allí, aunque no se lo notificó al Gobierno porque el acuífero aún no era de propiedad municipal. Insiste en que no entiende la decisión judicial de paralizar el plan.

MOISÉS RODRÍGUEZ/ RIBARROJA

Un pozo a 1,5 kilómetros capaz de dar agua a diario a unos 20.000 habitantes. Francisco Tarazona, alcalde de Ribarroja, sostiene que este acuífero está reservado para abastecer a las más de 2.800 viviendas y la Ciudad Deportiva que promueve el Valencia en la partida de Porchinos. Así, el jefe de la Corporación reitera su postura contraria al auto dictado por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ), que ha paralizado el proyecto por no estar garantizado el suministro hídrico por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).

Tarazona señaló que del pozo de Mas de Escoto se pueden extraer alrededor de 6.000 litros de agua por minuto. Asimismo, el alcalde de Ribarroja señaló que del acuífero, que adquirió el Ayuntamiento hace unos dos años y que actualmente está en desuso, saldrá una ramificación hacia Porchinos, donde si finalmente se ejecuta el proyecto del Valencia residirán unas 9.000 personas. “En Ribarroja tenemos agua de sobra, yo no entiendo nada. Van contra el PP y por medio está el Valencia, que es más que un club. Si afectara al Madrid o al Barcelona, esto no habría pasado”, lamentó Francisco Tarazona.

El alcalde de Ribarroja señaló que los dos pozos con los que se abastece toda la población del municipio de Camp de Túria, que no alcanza por poco los 20.000 habitantes, se podría dar suministro a 50.000 personas. “Si el agua fuese petróleo, nosotros seríamos multimillonarios”. Las afirmaciones de Tarazona fueron constatadas por fuentes de la empresa Aquagest, adjudicataria del agua potable en Ribarroja y cuyo informe el TSJ calificó de deficitario en el auto que paraliza de forma cautelar Porchinos.Técnicos de Aquagest señalaron ayer que la maquinaria de los dos pozos de abastecen a la población de Ribarroja están ahora trabajando al 40% de su capacidad.

Los cerca de 20.000 habitantes de la localidad consumen al año unos 2,6 millones de metros cúbicos de agua.La concesionaria estima que para suministrar las viviendas y la Ciudad Deportiva de Porchinos serán precisos 1,2 millones de metros cúbicos. Las mismas fuentes de Aquagest cifraron que de los dos pozos de los que actualmente se nutre Ribarroja podrían extraerse ocho millones de metros cúbicos anuales si estuviesen en funcionamiento las 24 horas. Negociación con la CHJ Estos argumentos no parecieron convencer a la CHJ, que estima que no está garantizado el suministro para Porchinos.

El presidente del Valencia, Juan Soler, precisó ayer que el club lleva un año negociando con los técnicos del organismo hídrico. Así, Soler aventuró que la postura de la CHJ en la que basó el abogado del Estado su recurso y que ha desencadenado en el auto del TSJ paralizando el Plan Porchinos pueda estar desfasada. El presidente del Valencia reiteró que Ribarroja tiene “agua de sobra” y matizó que en caso de necesidad hay un acuerdo para recurrir a la depuradora de l’Eliana y a una potabilizadora.

El subdelegado del Gobierno en Valencia, Luis Felipe Martínez, se refirió al nuevo pozo que, según Tarazona, Ribarroja tiene reservado para Porchinos. “El alcalde puede decir lo que quiera, pero la CHJ requirió en su día información a las instituciones y no se le facilitó”.

El conseller de Territorio, Esteban González Pons, volvió a resaltar que su departamento no ha recibido notificación alguna sobre la paralización de Porchinos y señaló que se ha roto “el sagrado principio de igualdad procesal entre las partes”. El número tres del PP valenciano, Ricardo Costa, señaló que la paralización cautelar del plan de Porchinos “es una injerecia más del Gobierno para parar a la Comunitat” y calificó de “desvergüenza” la actitud de Zapatero “al querer frenar a los valencianos por tierra mar y aire”.

La oposición valoró el tema de forma diferente. El líder del PSPV, Ignasi Pla, afirmó que la paralización “pone de manifiesto la mala gestión urbanística” y añadió que los promotores “se han dado cuenta de que no se pueden fiar de un Consell que no cumple la legalidad”. La coordinadora de EU, Glòria Marcos. señaló que el Ejecutivo “actúa con negligencia de manera premeditada”.

Fuente lasprovincias.es