Entrevista Claudio Gómez Perretta
Este experto es autor de un estudio de efectos sobre la salud que presentó ayer en la Universidad de compostelana
Autor de la imagen: ÁLVARO BALLESTEROS
Firma: Marga Mosteiro
Lugar: Santiago
Claudio Gómez Perretta, jefe de sección de Investigación en Salud Pública en el Hospital Universitario La Fe (Valencia), es autor de un estudio sobre la salud por la exposición crónica de radiofrecuencias provenientes de las estaciones base de telefonía móvil. Los detalles del informe fueron explicados en la conferencia pronunciada ayer por el investigador en la Facultad de Psicología.
Los efectos sobre la salud de las personas son evidentes y claros. El síntoma central es la tendencia depresiva y, junto a éste, otros como la fatiga, desórdenes del sueño, irritabilidad y trastornos del apetito. Unos síntomas están ligados a otros.
¿Cuándo fue realizado el estudio?
Se hizo en el año 2003, en una pequeña localidad rural de Murcia, donde sólo hacía dos años que estaban sometidos a las emisiones electromagnéticas. Se analizó la situación de 144 personas, de las que el veinte por ciento usaban el móvil unos veinte minutos diarios. Los resultados fueron evidentes, y ello a pesar de que por entonces el número de estaciones de telefonía era menor a la situación actual.
Por lo que ahora los efectos son mayores.
Evidentemente. Pero, lamentablemente, aunque en dos ocasiones he intentado repetir los estudios para poder comprobar el nivel de afección actual, el Ministerio de Sanidad ha denegado en las dos ocasiones las ayudas económicas para llevarlo adelante.
¿A qué responde esta actitud?
Las autoridades sanitarias no tienen interés en este asunto. Son muy activos en otras cuestiones como el tabaco, pero la contaminación electromagnética no les preocupa.
Las empresas de telefonía móvil aseguran que no hay riesgo dentro de los límites marcados por la legislación.
En el estudio realizado en la localidad de La Ñora, en Murcia, la población estudiada estaba por debajo del límite aconsejado (0,1 microvatios por centímetro cuadrado) y los efectos fueron detectados. Es lógico que las empresas defiendan sus intereses económicos, pero lo que dicen no es cierto. La situación puede ser todavía peor. El sistema wifi emite a 25 microvatios por centímetro cuadrado. Aquí en la Universidad hay determinados sitios donde se está expuesto a estos niveles de radiaciones.
Este experto es autor de un estudio de efectos sobre la salud que presentó ayer en la Universidad de compostelana
Autor de la imagen: ÁLVARO BALLESTEROS
Firma: Marga Mosteiro
Lugar: Santiago
Claudio Gómez Perretta, jefe de sección de Investigación en Salud Pública en el Hospital Universitario La Fe (Valencia), es autor de un estudio sobre la salud por la exposición crónica de radiofrecuencias provenientes de las estaciones base de telefonía móvil. Los detalles del informe fueron explicados en la conferencia pronunciada ayer por el investigador en la Facultad de Psicología.Los efectos sobre la salud de las personas son evidentes y claros. El síntoma central es la tendencia depresiva y, junto a éste, otros como la fatiga, desórdenes del sueño, irritabilidad y trastornos del apetito. Unos síntomas están ligados a otros.
¿Cuándo fue realizado el estudio?
Se hizo en el año 2003, en una pequeña localidad rural de Murcia, donde sólo hacía dos años que estaban sometidos a las emisiones electromagnéticas. Se analizó la situación de 144 personas, de las que el veinte por ciento usaban el móvil unos veinte minutos diarios. Los resultados fueron evidentes, y ello a pesar de que por entonces el número de estaciones de telefonía era menor a la situación actual.
Por lo que ahora los efectos son mayores.
Evidentemente. Pero, lamentablemente, aunque en dos ocasiones he intentado repetir los estudios para poder comprobar el nivel de afección actual, el Ministerio de Sanidad ha denegado en las dos ocasiones las ayudas económicas para llevarlo adelante.
¿A qué responde esta actitud?
Las autoridades sanitarias no tienen interés en este asunto. Son muy activos en otras cuestiones como el tabaco, pero la contaminación electromagnética no les preocupa.
Las empresas de telefonía móvil aseguran que no hay riesgo dentro de los límites marcados por la legislación.
En el estudio realizado en la localidad de La Ñora, en Murcia, la población estudiada estaba por debajo del límite aconsejado (0,1 microvatios por centímetro cuadrado) y los efectos fueron detectados. Es lógico que las empresas defiendan sus intereses económicos, pero lo que dicen no es cierto. La situación puede ser todavía peor. El sistema wifi emite a 25 microvatios por centímetro cuadrado. Aquí en la Universidad hay determinados sitios donde se está expuesto a estos niveles de radiaciones.
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