Un largo y tranquilo paseo por La Vallesa (Paterna) para conocer los valores medioambientales del último pulmón verde, junto a El Saler, del área metropolitana de Valencia. Durante casi tres horas, alrededor de 300 personas vecinos de Paterna, la Canyada, San Antonio de Benagéber y l'Eliana recorrieron ayer unos ocho kilómetros por el interior del bosque para exigir su inmediata protección a la Generalitat Valenciana, ante las amenazas del ladrillo, los vertidos, los incendios y las carreteras.Paseo matinal. Decenas de vecinos de Paterna, San Antonio y l'Eliana recorrieron ayer ocho kilómetros por el interior del bosque de La Vallesa.
Cèsar Garcia
Y es que uno de los trazados propuestos por el Ministerio de Fomento para el segundo by-pass de Valencia cruza por el medio de la masa forestal. Por ello todos los asistentes, incluidos los políticos de todos los colores, se pusieron las ya famosas pegatinas: «No otro by-pass por Paterna»; «Salvem La Vallesa»; y «El bosque de La Vallesa, paraje natural, ¡ya!».
La marcha por el frondoso bosque, en la zona que no está vallada por la propiedad privada de la familia Trénor, coincidió con el final de una semana donde se puede haber empezado a salvar La Vallesa para las generaciones futuras de valencianos. Ayuntamiento, Generalitat y Ministerio de Medio Ambiente, reunidos por primera vez para debatir la conservación de la masa forestal, decidieron que la primera medida que había que tomar era dotar al paraje con una figura legal de protección que lo ponga a salvo: parque natural o paisaje protegido. El paraje natural municipal se descarta porque es necesaria la conformidad de los dueños, que se han mostrado contrarios a la negociación a los precios tasados de suelo forestal que ofrece el consistorio que preside Francisco Borruey, presente en el paseo.
La marcha comenzó temprano. Los vecinos partieron del Centro Social de la Canyada y al llegar al apeadero de la Vallesa esperaron a que llegaron los compañeros de San Antonio y l'Eliana. Hasta niños en carro con sus padres disfrutaron de la naturaleza.
A medio camino la marcha se detuvo en un claro del monte. Justo en un punto por donde puede pasar el by-pass. El portavoz de la junta de barrio y el presidente, José Carot y Javier Picazo, respectivamente, explicaron que aún no hay nada decidido por parte de Fomento, pero «con la ayuda de todos lograremos que no se haga». Al final del trayecto se disfrutó de un merecido almuerzo. Y vuelta a casa por el bosque.
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